28.11.07

Diecisiete

La tarde es un pecho que no respira
y tiene tu nombre
y si me muevo la hiendo sangra
llora igual que tus diecisiete años
que me miran desde las seis y cuarto como si fueran una foto.

La muerte existe porque existe la tarde
y vos
cuando decidiste abandonar tus diecisiete sangrantes.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

para mí el texto terminaría muy muy lindo si sólo fuera: la muerte existe porque existe la tarde. Ese verso es una belleza. Chau, E.

Anónimo dijo...

y todo muere y vuelve a nacer con el día, y los años cada vez que acaban, sangran...

beso.

Claroscuro dijo...

No me convence.

!!¿¿¿Y qué carajo es hiendo???!!

María (Letras) dijo...

Hiendo es la primera persona del singular, presente del indicativo del verbo hendir... hasta donde mi intuición alcanza.

Y a mí me gusta T.T... ¿por qué a nadie más?

Claroscuro dijo...

No sé, está muy fragmentado para mi gusto.