26.10.06

Templo

profundo
bajo, en las grietas de la piel
se escondía la sangre.
acá, muy cerca de donde duermo, acá en lo subterráneo, más cerca del hueso, del dorso, acá donde respiro, lo turbio de mi carne muerta, acá, tumba de hombres, lecho y posguerra, subterfugio, camposanto de mí misma.
acá yacía la sangre.
y fue tan simple hundirme a buscarla, segundos nimios, los labios yermos, una nada, casi, cosa de gentes simples, líneas rojas, nada más, burbujitas, qué poca cosa, tinta suave, yerma y silencio.
dormía la sangre.

qué poca cosa fue destrozar el templo.


(16/10/06)

5 comentarios:

... dijo...

Mal...

María (Letras) dijo...

Chist!
-.-

... dijo...

¬¬*

... dijo...

No destroces más templos...¬¬

María (Letras) dijo...

Lo prometido es deuda.

(Gracias)