y de la punta de cada minuto, como soplada, salía una sonrisa
una sonrisa grande, con patio y tres piezas, y lavadero y cocina y hamaca.
una sonrisa como llevada por pájaros por el aire tibio de las sábanas, el aire tibio de las cortinas que a veces son sábanas.
y corríamos por el cuerpo del otro encantados con el paisaje y con el momento del día, momento sin tiempo que duraba un momento nada más pero igual qué sé yo, me gustaba. corríamos con los pies empapados de las lágrimas de Ayer, que nos hacían resbalar pero podíamos caer y reírnos, junto a las lágrimas que también se reían y junto a ayer, que se quedaba dormido en tu falda.
y todas las paredes no importaban porque eran como ojos ciegos y descascarados que se callaban para no molestar a todo lo que sí
importaba.
y después venía Enrique a leer, y me regalaba la cadencia luminosa de este gran verso, y yo tomaba el lápiz que hacía eco sobre tanta blancura y decía nunca, nunca, nunca más voy a escribir en voz bajita. Nunca más voy a esconderme en la ceniza del fuego muerto. Nunca más voy a dejar de respirar.
y vos me mirabas fuerte con ese color de otoño entre los párpados y aunque no entendieras de qué carajo estaba hablando sabías que mentía, que siempre iba a volver todo lo demás, el vestido de novia, las flores lloronas, la asfixia. Pero no te importó
porque no importaba
como las paredes, como Ayer que dormía y parecía muerto.
Importaba
solamente
que a cada rato salía del aire una sonrisa en forma de pañuelo.
(En la memoria suena Enrique Symms, y por eso no puedo callar este poema que en realidad es en voz alta. El ritmo se le parece tanto, que en realidad es casi una burla, y las palabras, esa sensación de no importa si los semas clichés corretean por todos lados. Me encanta así, me encanta. Lástima no poder grabar mi euforia. Maldito mp3 rompible y rompido. Gracias a Franco, mensajero de estas sensaciones.)
23.2.09
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
que lindo tu poema blanco y perfumado. ojalá escribas muchos más, aún si después la asfixia. estúpida y necesaria asfixia.
Publicar un comentario